Viaje a los sabores de Tandil: Cagnoli comparte tips para degustar las mejores picadas de fin de año


Es tiempo de disfrutar de las fiestas de fin de año y no hay mejor manera de hacerlo que con una 
picada tandilense para degustar de los sabores tradicionales de los mas ricos quesos y chacinados de la Argentina. En todos los encuentros están siempre presente y no puede faltar en estas fechas del año. Aquí compartimos algunos consejos para sentirnos especialistas en su preparación y degustación junto a Cagnoli.

El primer punto, cuáles son las cantidades correctas

Es clave tener en cuenta las proporciones para no gastar demás y que todos los comensales queden satisfechos. Si es solo para picar, calcular 100 grs de fiambres y quesos por persona. Mitad de fiambres y mitad de quesos. Si la picada es el plato principal, entonces calcular 150 grs. de fiambres y quesos, con la misma proporción. A eso se pueden sumar 80 grs. de panificados por persona, vegetales y frutos secos.

Lo ideal es ir degustando de forma separada cada producto para no mezclar sabores en boca, aunque todo es tan rico que a veces resulta difícil.

Pasos de la degustación

Se recomienda degustar desde los sabores más suaves a los más intensos, tanto para los fiambres, embutidos y quesos. De ese modo es conveninte ir probando inicialmente productos de baja condimentación como el Fuet, un Jamón Horneado, un Salamín Tandilero Picado Fino y luego pasar a productos más intensos como el salame recubierto con ají molido, una Spianatta a la pimienta, o los nuevos sabores: Salamín Picado Fino Picante y Ahumado.


Variedad de fiambres y calidad

Es importante que en la mesa se pueda degustar la variedad de fiambres y chacinados. Cada uno aporta perfiles de sabor, texturas y aromas muy diferentes. Desde salazones como el jamón crudo o la bondiola, embutidos secos, como los salames o salamines, fiambres cocidos como un jamón cocción lenta o el jamón horneado, y pastas finas como la mortadela o el leberwurst.

La calidad de los productos elegidos es esencial para una buena picada. Para lograr un buen chacinado, un buen fiambre, hay mucho trabajo detrás y experiencia que solo la otorga el saber hacer. 

Según explica Juan Pedro Cagnoli, responsable del sector de elaboración y parte de la cuarta generación de la familia: “Esto tiene tanta trascendencia, viene de hace tantos años. No se aprende como hacer un buen jamón crudo o buen salamín leyendo un libro. Es el saber transmitido de generación en generación y todo el trabajo que se hace para mantener las recetas y los sabores que nos caracterizan. Esto solo lo da la experiencia. La diferencia de la calidad del producto reside en lo que hace el artesano sobre cada uno de los ingredientes. Se trabaja en cada detalle para lograr diferentes perfiles de sabor en los productos.

¿Cuál es el mejor maridaje para una picada?


Existen diferentes tipos de maridajes. Por contraste, por complementariedad, y por similitud. Cualquiera es válido, el desafío es probar las diferentes combinaciones tanto de fiambres, quesos, y bebidas. Por ejemplo, combinar un salamín tandilero picado fino ahumado con un queso y una cerveza ahumados. Un salame DOT (Denominación de Origen Tandil) con un típico queso banquete de Tandil y un vino Malbec Argentino.

Los embutidos artesanales ofrecen una diversidad de productos auténticamente argentinos, inspirados en recetas italianas y españolas, pero con todo el sabor de lo nuestro. A estos productos se pueden sumar encurtidos que aportan acidez, frutos secos que aportan fibra, vegetales que aportan frescura y diferentes “hummus” que le aportan untuosidad. Los maridajes más típicos con bebidas son con cervezas, vinos o vermut.