Decameron: “Toda nuestra comercialización se realiza a través de operadores mayoristas”


La cadena hotelera Decameron atraviesa una etapa de reacomodamiento en la región, con aperturas previstas, cierres temporales por mantenimiento y una fuerte apuesta a su histórico bastión del Caribe colombiano. En diálogo con este medio, José Ljubic, gerente comercial de la compañía, detalló el estado de las reservas de cara a la temporada alta, el perfil del viajero que elige la marca y el rol de las agencias de viajes dentro de la estrategia comercial de la compañía.

Con presencia en Colombia, México, Panamá, Ecuador, Perú y otros destinos de la región, Decameron mantiene una estructura de producto basada en hoteles de 3 y 4 estrellas, servicios all inclusive y un sistema propio de traslados y excursiones. Ljubic explica cómo se proyecta la demanda, qué impactos genera la mayor conectividad aérea y cuáles son los proyectos en análisis para los próximos años.

- ¿Cómo están las ventas y reservas para la temporada alta en los resorts de Decameron en el Caribe?

José Ljubic: - Estamos muy parecidos al año pasado. Nuestro mayor posicionamiento sigue siendo Colombia, donde tenemos la mayor cantidad de hoteles: en Cartagena, Barú, el Eje Cafetero (Pereira, Armenia y Manizales), el Amazonas y, sobre todo, San Andrés, donde actualmente contamos con cinco propiedades. Antes eran seis, pero el Decameron Aquarium está cerrado por un mantenimiento integral. Además, tenemos presencia en Panamá y El Salvador.

- ¿Y cómo está la operación en México y Jamaica?

J. L.: - En México contamos con cinco propiedades en la Riviera Nayarit y Guayabitos, una en Los Cabos, y dos hoteles en Jamaica que por el momento no estamos comercializando porque la isla aún no restableció plenamente sus servicios básicos tras el paso del huracán.

- ¿Cuál es el público que elige Decameron?


J. L.: - No tenemos hoteles solo para adultos, así que captamos desde parejas hasta familias. Muchas habitaciones aceptan acomodación cuádruple, lo cual es ideal para familias con dos hijos. Esto aplica en Cartagena, Barú y varios hoteles de San Andrés. Nuestro público principal son familias y parejas sin hijos, pero siempre dentro de un esquema inclusive.

- Cómo trabajan con las agencias de viajes?

J. L.: - Toda nuestra comercialización se realiza a través de operadores mayoristas; no vendemos directo ni a agencias minoristas. Participamos activamente en workshops, presentaciones, caravanas, eventos como la ECTU y en acciones conjuntas con aerolíneas que vuelan a nuestros destinos, como Avianca y Copa.

- Si tuvieras que destacar las principales características del producto Decameron en el Caribe, ¿cuáles serían?

J. L.: - Nuestros hoteles son de tres y cuatro estrellas. En Colombia, los únicos cuatro estrellas son Decameron Isleño en San Andrés y Decameron Barú en Cartagena. Otro punto clave es que no somos un all inclusive de 24 horas: el servicio comienza a las 7 de la mañana con el desayuno y se extiende hasta alrededor de la 1 o 1.30 de la madrugada, cuando cierran las discotecas. Durante el día hay snacks y comidas rápidas.

Además, contamos con Decameron Explorer, nuestra unidad que gestiona traslados y excursiones en destino, con oficinas propias en aeropuertos y hoteles. Esto permite que operadores, agencias y pasajeros resuelvan todo con un único proveedor.

- La mayor conectividad aérea de la región, impulsa la demanda?

J. L.: - Sin dudas. Avianca y Copa aumentaron significativamente sus frecuencias, no solo desde Buenos Aires, sino también desde Córdoba, Rosario, Mendoza y Salta. Esto hace mucho más ágil la comercialización. Después entra en juego el factor tarifario, pero en comparación con años atrás, hoy hay una oferta aérea muy variada.

- ¿Cuál es el foco actual de la compañía?

J. L.: - Estamos muy concentrados en la temporada alta. La ampliación de la conectividad también nos abre nuevas posibilidades; por ejemplo, Copa empezará a volar a Los Cabos, donde tenemos un hotel, lo que nos permite diversificar la venta más allá del fuerte colombiano.

- ¿Hay proyectos de expansión en otros destinos?

J. L.: - Sí, siempre evaluamos alternativas. En su momento analizamos República Dominicana y Brasil, pero la pandemia retrasó esos planes. Hoy estamos enfocados también en el proyecto de expansión de Decameron Barú, aunque todavía no hay definiciones concretas.

- En los últimos años, algunos hoteles han cerrado. ¿A qué se debe?

J. L.: - Son situaciones diversas. Tuvimos que cerrar el Aquarium para una renovación completa; Jamaica está temporalmente fuera de operación por el huracán; y en Haití cerramos un resort excepcional porque la situación política no mejoraba. Son decisiones duras, pero necesarias para resguardar la operación y la experiencia del huésped.