Según el último Barómetro de la ONU Turismo, el primer semestre de 2025 cerró con una cifra histórica: 690 millones de viajeros internacionales, superando en 33 millones los registros del mismo periodo de 2024. Sin embargo, este crecimiento récord, que ya supera en un 7% los niveles prepandemia en Europa, no logra ocultar las profundas grietas y desafíos que amenazan su futuro, como la elevada inflación sectorial y la inestabilidad geopolítica.
Recuperación en dos velocidades
La fotografía del turismo mundial es de una recuperación profundamente desigual. África se erige como la gran protagonista, con un crecimiento del 12%, impulsada tanto por el norte del continente (+14%) como por el África subsahariana (+11%). Le sigue la región de Asia y el Pacífico, que, con un aumento del 11%, se acerca al 92% de sus cifras de 2019.
Europa, con 340 millones de llegadas, consolida su recuperación con un 4% más que en 2024, mientras que Américas presenta un panorama fragmentado: mientras Sudamérica crece con fuerza (+14%), el turismo en Norteamérica y el Caribe se estanca, lastrado por una menor demanda desde Estados Unidos.
En el extremo opuesto, Oriente Medio ve caer sus llegadas un 4% en comparación con 2024, un dato que palidece al comprobar que sigue siendo la región más recuperada del mundo, con un asombroso 29% más de turistas que antes de la pandemia.
Destinos que marcan el paso
Japón y Vietnam, ambos con un alza del 21%, lideran el ranking de crecimiento entre los destinos importantes, seguidos de cerca por Marruecos (+19%) y la República de Corea (+15%). Destinos tradicionales como Francia y España también muestran una salud envidiable, con un crecimiento del 5% en llegadas. Los ingresos, asimismo, se disparan en países como Japón (+18% en ingresos turísticos) y el Reino Unido (+13%).
Amenaza en el horizonte: precios y geopolítica
Pero este panorama optimista se nubla al analizar los factores de riesgo. La encuesta del Grupo de Expertos de la ONU Turismo señala que los elevados costos de transporte y alojamiento son el principal lastre para el sector en 2025. Se prevé que la inflación en turismo, aunque baje al 6,8% este año, se mantendrá muy por encima de la tasa general.
"Los turistas seguirán buscando la mejor relación calidad-precio, viajarán a destinos más cercanos, realizarán viajes más cortos o gastarán menos en respuesta al aumento de los precios", advierte el informe. A esto se suma una "menor confianza de los consumidores" y las "crisis geopolíticas", identificadas como el tercer y cuarto factor de riesgo más importantes.
A pesar de los desafíos, el Índice de Confianza de la organización mejora ligeramente para el último trimestre del año. La mitad de los expertos consultados esperan resultados "mejores" o "mucho mejores" para el cierre de 2025. Esta confianza se traduce en el mantenimiento de las previsiones: la ONU Turismo espera que el año cierre con un crecimiento de las llegadas internacionales de entre un 3% y un 5%.