Radar de Viajes reveló cómo Arabia Saudita se encuentra desarrollando una moderna infraesctructura turística así como sus innovadores productos y atractivos que brinda a los visitantes de todas partes del mundo. Se trató de una experiencia única que vivió el periodista especializado en turismo, Alejandro San Martín y que lo cuenta para nuestros lectores. Pasen y lean..
Bajo el plan denominado ‘Visión 2030’, el Reino se encuentra enfocado en culminar una serie de ‘Giga Projects’, entre los que se encuentra la ciudad de Neom, un megaproyecto urbano al noroeste del país que incluye una ecociudad lineal inteligente llamada The Line, un centro de esquí en el desierto (Trojena) -que será sede de las Olimpíadas de Invierno de Asia-, un complejo industrial flotante (Oxagón), y un resort turístico de súper lujo sobre el Mar Rojo.
Considerada una de las líderes más influyentes de la industria turística, Gloria Guevara llevó a Arabia Saudita toda su experiencia previa en el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC en sus siglas en inglés), de la que fue presidente y CEO entre 2017 y 2021.
“Habla de la relevancia del sector, y es algo muy importante. Este joven de 38 años está llevando a cabo una revolución interesantísima sin precedentes en este país. Tiene una visión tan clara del mundo, de cómo estamos conectados, así como de las diferentes regiones y los diferentes sectores que, aunque este país tiene tanto petróleo para 100 años, él está apostando al turismo que aquí le llaman aquí el nuevo petróleo”, refirió Guevara ante un contingente de periodistas de América Latina y España.
Riad y el corazón de una nación
En esta inmensa urbe todo parece en construcción. Grandes cadenas de hoteles ya se hicieron presentes en el Reino, así como las más importantes marcas y restaurantes. Y si se quiere conocer lo que apuesta al turismo este país, nada mejor que una visita Diriyah, conocida como el corazón de la nación, y que es uno de los puntales del proyecto Visión 2030, al noroeste de la capital, declarada Patrimonio de la Humanidad en 2010 y fundada en el siglo XV.
Los palacios y sinuosas callecitas en un pequeño mundo de adobe lo convierten en un lugar único que despertó las ganas de restaurarlo para mostrar al público los más de 300 años de cultura e historia de Arabia Saudita.
El proyecto Diriyah se extiende sobre 14 kilómetros cuadrados donde se prevé la construcción de una universidad y un museo, además de lugares para albergar 6.000 residentes. “Será una ciudad del entretenimiento, hasta con su propia avenida al estilo Champs Elysées”, descubre Guevara.
Al-Ula, la joya del desierto
Resumir en una sola crónica todo lo que ofrece esta región es literalmente imposible. Desde las formaciones rocosas caprichosas que permiten adivinar diversas figuras, como la piedra elefante, pasando por las tumbas esculpidas en las rocas en la antigua ciudad de Hebra -conocida por la segunda Petra, y el primer sitio de Arabia Saudita en ser declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco-, hasta la vieja ciudadela casi esculpida en el paisaje, son solo algunas pinceladas de este lugar de encanto.
Esta región, que fue punto de encuentro de la Ruta del Incienso y de la Seda, es también aprovechada por los sauditas como escenario natural para conciertos de música internacional, como el que ofreció Bruno Mars a principios de octubre, con la impactante combinación de tecnología con naturaleza.
Jeddah, a orillas del Mar Rojo
La ciudad rebosa de movimiento. Es sitio elegido por muchos turistas internacionales que desean disfrutar de las playas y las puestas del sol en el Mar Rojo, y que además ofrece una variada oferta gastronómica, grandes tiendas, y una zona antigua que encierra joyas históricas culturales del mundo musulmán.
Como parte de los Giga Projects, el del Mar Rojo está llamado a constituirse en un santuario que ofrecerá experiencias para disfrutar de un entorno natural especial que abarca un archipiélago de más de 90 islas vírgenes, kilómetros de extenso desierto y paisajes espectaculares que incluyen volcanes y cañones.
En línea con la Visión 2030 de Arabia Saudita, el Proyecto del Mar Rojo abraza el ecoturismo, el promueve la sostenibilidad, la conservación del medio ambiente y el crecimiento económico, creando oportunidades laborales en el proceso.