Crisis del receptivo: Argentina registró un declive del 15,9% de turistas extranjeros en septiembre


En un contexto de incertidumbre económica y desafíos cambiarios, el turismo receptivo en Argentina ha sufrido una nueva baja en septiembre, registrando un descenso del 15,9% en comparación con el mismo mes del año anterior. 

Este es el sexto mes consecutivo en que el país ve caer el número de turistas internacionales, una tendencia que ha encendido alarmas en la industria. Según el informe ETI (Estadísticas de Turismo Internacional) del Indec, 461,9 mil turistas internacionales ingresaron a Argentina en el noveno mes de 2024, en contraste con los 549 mil que lo hicieron en septiembre de 2023.

Esta caída en el turismo receptivo no es aislada: desde principios de año, Argentina ha venido acumulando cifras negativas en cuanto al ingreso de visitantes extranjeros. Entre enero y septiembre de 2023, el país recibió a 4,9 millones de turistas internacionales, mientras que en el mismo período de 2024 la cifra se redujo a 4,7 millones, acumulando una pérdida de 200 mil turistas. Las razones detrás de esta disminución parecen estar asociadas a la creciente inflación y a las dificultades económicas que impactan tanto en los viajeros como en los operadores turísticos.

Septiembre también reveló otra cifra alarmante en el turismo receptivo. Al considerar el total de visitantes, incluyendo tanto a turistas que pasan al menos una noche como a excursionistas de un solo día, ingresaron al país 836,9 mil personas. De este total, 461,9 mil fueron turistas internacionales y 375 mil excursionistas, lo que evidencia una merma en las estancias prolongadas. Comparado con el mismo período del año pasado, Argentina ha sufrido una baja del 14% en el total de visitantes internacionales.

En términos de procedencia, los datos de septiembre muestran que los turistas provienen en su mayoría de países vecinos. Brasil lidera el ranking, representando el 24,9% del total de turistas internacionales con 115 mil visitantes. Le siguen Uruguay, con un 24,2% y 111,6 mil turistas, y Chile, que ocupa el tercer lugar con 15,8% y 73,2 mil visitantes. Estas cifras reflejan una dependencia del mercado regional, que, aunque importante, también resulta vulnerable a las fluctuaciones económicas y políticas de los países cercanos.

Por otra parte, los mercados más distantes muestran cifras modestas. El resto de América sumó 50,5 mil turistas, seguido de Paraguay con 36,2 mil, Europa con 34,9 mil, y finalmente Estados Unidos y Canadá, que aportaron apenas 20 mil visitantes. La categoría “Resto del Mundo” apenas registró 8,9 mil turistas, lo que resalta las dificultades de captar mercados más lejanos, donde los gastos en transporte y las restricciones cambiarias argentinas complican las estadías prolongadas.

A lo largo de 2023, Argentina había alcanzado los 9,7 millones de visitantes internacionales entre turistas y excursionistas en el periodo de enero a septiembre. Sin embargo, este año la cifra descendió a 8,3 millones, mostrando un impacto en el sector que se siente desde las áreas metropolitanas hasta los destinos más populares del interior. Esta caída en el volumen de visitantes internacionales implica un golpe financiero directo para las economías locales dependientes del turismo.

Con la crisis del turismo receptivo aún vigente, la industria enfrenta el reto de encontrar estrategias para revertir esta situación. Los expertos del sector consideran que, para 2024, será fundamental consolidar el turismo regional y explorar nuevos mercados, a la vez que se abordan los desafíos cambiarios y económicos que disuaden a muchos potenciales visitantes.