Lluvia de bloggers de viajes en #RedViajar 2013

Llueve a cántaros. Después de una semana agitada me encuentro en las verdes sierras de Tandil. Mientras veo caer la lluvia del otro lado de la ventana escribo este post sobre algunas de las inquietudes que me dejó el encuentro de bloggers más importante de la Argentina, RedViajAr 2013.
 
En principio creo que hay que felicitar a los organizadores, al grupo en general y a la cabeza del proyecto, Jorge Gobbi: el movimiento de blogueros de viajes sigue creciendo en el país gracias a este tipo de encuentros que son una fuente de inspiración para muchos. No me olvido de Wenceslao Bottaro, que este último tiempo le puso todas sus fichas a esta iniciativa.

Los bloggers de viajes fueron uno de los últimos actores en entrar a escena en la industria de los viajes y el turismo. Impulsados por las nuevas (viejas) tecnologías en comunicación se abrieron paso hace casi una década ocupando parte del espacio que dejaron vacante (por falta de credibilidad o por excesos comerciales) los medios tradicionales dedicados a los viajes y los periodistas especializados.

Justamente hoy esa frescura que los llevó a ganar lectores y a ser visibles en el sector, fue parte del debate en torno a este evento y a su organización. La cuestión de dar un paso más y entrar en el circuito comercial es todavía para algunos un dilema.

Es decir, una parte de los bloggers de viajes de la argentinas se preguntan hoy si vale la pena entrar en el negocio y si esa transformación implicará perder su esencia. A cambio de ello está la tentación de ser invitados a viajar por los empresarios y por los destinos, la parte pública y privada, que aceitan los engranajes de esta industria.

Los detractores de avanzar en ese sentido piensan que así no se podrá mantener el espíritu inicial, la mirada subjetiva que adoran los lectores de historias de viajes. Sin embargo, frente a ello hay ejemplos como el de Colombia, con su brigada digital turística en apoyo a la difusión de los sitios emblema de su país, respaldados por el Gobierno.

A diferencia de los más bohemios, otros bloggers observan esta posibilidad como una oportunidad para dedicarse full time a este trabajo y constituirse como verdaderos profesionales.
Lo cierto es que a pesar de haberse conformado una red de bloggers de viajes, el grupo es muy heterogéneo y volátil, con lo cual no todos quieren ir hacia el mismo lado. Se sabe que el componente personal es importante en toda conformación de grupos y este caso no escapa a la regla general.

Lo bueno es que si llaman la atención hay muchas posibilidades para seguir creciendo. Eso es lo que me comentaban algunos de los participantes. Tengo que dejar de escribir...

Me llaman para salir de paseo a pesar de la lluvia tandilense. Por la ventana se puede ver cómo la tormenta funde un cielo gris con el manto verde de las sierras. La postal es hermosa. Tanta lluvia, tanto verde. Tal vez hoy los bloggers de viaje son algo así como la lluvia que reverdece y nadie puede negar que son hermosas esas lluvias de primavera.